Construir los cimientos del crecimiento social y emocional
El programa preescolar de Trinity School para niños de 2 a 3 años se centra en sentar las bases de un desarrollo social y emocional esencial dentro de un entorno de aprendizaje cuidadosamente diseñado. Nuestro programa se dedica a nutrir el crecimiento a través de la exploración activa y experiencias táctiles que atienden a nuestros alumnos más jóvenes.
Nuestra aula está diseñada para que los niños pequeños participen en actividades prácticas y experiencias sensoriales, reconociendo que los niños pequeños aprenden mejor interactuando con su entorno. Proporcionamos un entorno rico en texturas, colores y formas, con contenedores sensoriales, juguetes interactivos y estructuras seguras para trepar. Este entorno fomenta la curiosidad, el descubrimiento y la participación activa, haciendo que el aprendizaje sea agradable y eficaz.
En esta etapa del desarrollo de los niños pequeños, las habilidades de socialización están emergiendo a medida que empiezan a entender e interactuar con sus compañeros. Facilitamos actividades en grupo y juegos guiados, fomentando el asombro, la curiosidad, la exploración y las interacciones cooperativas. Estas experiencias ayudan a los niños pequeños a sentar las bases para formar amistades y desarrollar la empatía. Como los niños de dos años están ansiosos por afirmar su independencia, nuestro programa los apoya ofreciéndoles actividades que promueven las habilidades de autoayuda que aumentan su confianza y fomentan una mentalidad de "puedo hacerlo". Creamos oportunidades para que los niños elijan y expresen sus preferencias, ayudándoles intencionadamente a desarrollar un sentido de autonomía.
El desarrollo del lenguaje es un objetivo importante durante este periodo. Nuestro rico entorno lingüístico, lleno de canciones, cuentos e interacciones conversacionales, ayuda a los niños pequeños a mejorar su vocabulario y sus habilidades comunicativas. Los educadores modelan el uso del lenguaje y fomentan la expresión verbal para promover su crecimiento.
El desarrollo físico también es crucial para los niños pequeños. Incorporamos actividades que fomentan la motricidad gruesa y fina, como gatear, andar, trepar y manipular objetos pequeños. Estas actividades ayudan a mejorar la coordinación, el equilibrio y la destreza, vitales para su crecimiento.
También reconocemos la importancia de la colaboración con las familias, especialmente en áreas como el control de esfínteres. Nuestros educadores colaboran estrechamente con los padres para establecer rutinas coherentes de control de esfínteres y proporcionar orientación y estímulo. Los consejos prácticos y el apoyo ayudan a que esta transición sea más suave para los niños y las familias.
La coherencia en las rutinas diarias es fundamental para que los niños pequeños se sientan seguros y confiados. Nuestro programa hace hincapié en las rutinas regulares para la hora de comer, la siesta y el juego, y trabajamos con las familias para garantizar que las rutinas en casa y en la escuela estén alineadas. Esta coherencia crea un entorno estable que favorece el crecimiento emocional y el desarrollo.
El refuerzo positivo y la validación son parte integrante de nuestro enfoque. Celebramos los logros de todos los niños, independientemente de su tamaño, y les animamos ampliamente para fomentar su autoestima y motivación. Nuestro objetivo es ofrecer un ambiente de apoyo en el que todos los niños se sientan valorados y capaces.
Nuestro programa preescolar para niños de 2 a 3 años está meticulosamente diseñado para favorecer un desarrollo holístico. Al concentrarnos en la exploración activa, la socialización, la independencia, el lenguaje y las habilidades físicas, proporcionamos una base integral para el crecimiento futuro. Nuestro enfoque de colaboración con las familias garantiza que cada niño reciba apoyo personalizado para prosperar.
